¿Cómo mantener tu piel luminosa en verano?
Con el paso del tiempo y sobre todo en esta época del año, debido al sol y el calor, nuestra piel va perdiendo luminosidad. Hoy os vamos a dar algunos trucos para mantener nuestra piel perfecta también en verano, por supuesto cuidándola antes de vacaciones con los tratamientos estéticos faciales de Clínica March.
Además del calor, hay otros muchos: dormir poco, beber poca agua, una mala alimentación y hábitos nocivos (tabaco, alcohol), son factores que también pueden apagar nuestra piel.
Si creas una rutina contínua para el cuidado de tu piel recuperarás la luminosidad que se pierde durante la época estival.
TIPS PARA RUTINA FACIAL
- Tratamientos faciales mensuales. Te recomendamos que cada vez trabajes tu piel de manera profesional con tratamientos estéticos que ayuden a revitalizar, dar luminosidad, rellenar o corregir imperfecciones, etc. En Clínica March contamos con una amplia gama para que puedas elegir el que más se adapte a tus necesidades. Déjate aconsejar por nuestro equipo de expertos y presume de piel. Algunas técnicas como la carboxiterapia, ácido hialurónico o prp te ayudarán a tener una piel perfecta.
- Limpieza – por la mañana y por la noche- es necesaria para eliminar el sudor, la suciedad y el maquillaje. Puedes utilizar gel limpiador suave, para que no reseque tu piel, o agua micelar.
- El tónico facial, además de refrescar tu piel y cerrar los poros, reequilibra su pH tras el desmaquillado.
- Crema Hidratante. Es importante elegir una crema hidratante que se adapte a tu tipo de piel, y aplicar de día y de noche. Se aconseja combinarlo con un hidratante para el contorno de ojos.
- Los productos con vitamina C aportan antioxidantes, vitaminas y protección frente a los radicales libres.
- Protección solar. Se recomienda utilizar protección solar alta en la zona del rostro para protegernos de los rayos nocivos del sol.
- Descansa las horas necesarias y duerme bien.
- Aunque tu rutina de limpieza e hidratación sea buena, si no bebes agua, tu piel irá deshidratándose, lo que se traduce en una piel más envejecida a largo plazo.
